Patricia Heras, una de las personas condenadas por los hechos de Sant Pere de Més Baix, se suicidó el 26 de Abril en su casa. Patricia, que había relatado en su blog una versión de los hechos contraria a la versión aceptada por el tribunal, llevaba seis meses en prisión por un delito que no cometió, cuatro de ellos en tercer grado, yendo a la penitenciaría a dormir.
Patricia, la noche del 4 de febrero de 2006, se cayó de su bicicleta y se dirigió al hospital junto con un amigo. Como ella misma dijo, “directa hacia el infierno”. Fue detenida, maltratada y acusada por los hechos de la calle Sant Pere Més Baix, donde se estaba celebrando una fiesta tipo rave en una casa “ocupada”, donde un Guardia Urbano resultó gravemente herido. Concretamente, la hacían autora del lanzamiento de una valla contra la policía, que causó un hematoma en el muslo a otro agente de la Guardia Urbana. Ella nada tenía que ver con los hechos, pero fue condenada en 2008 – a pesar de las grandes contradicciones, irregularidades y cambios de declaraciones por parte del Ayuntamiento y de la Guardia Urbana – a 3 años de prisión por atentado contra la autoridad.
Pero los hechos no acaban aquí. En esa noche, antes de la detención de Patricia, tras la carga policial se producen nueve detenidas/os. Cinco estaban en la calle y cuatro salían en ese momento del edificio. El alcalde Joan Clos declaró, en la mañana del día siguiente de los hechos, en todos los medios de comunicación, que una maceta lanzada desde un edificio había herido de gravedad a un guardia urbano.
El tema de la maceta es central en la acusación contra Rodrigo Lanza (condenado a 5 años de cárcel), Alex Cisternas y Juan Daniel Pintos (condenados a 3 años y medio). Los acusados jamás entraron en el edificio, y por tanto no pueden haber lanzado una maceta. La nueva versión de la policía es que estos arrojaron piedras desde la calle, que al impactar en el guardia urbano éste cayó y se rompió la parte posterior del cráneo con la acera. Posibilidad que pusieron en duda la mayoría de los peritos médicos en el juicio (está en video).
Después de los incidentes la Guardia Urbana acordonó la zona. Cuando la policía científica se presentó en el sitio horas después se encontró con que la zona había sido completamente limpiada por el Servicio de Limpieza del Ayuntamiento de Barcelona. Este hecho ha sido fundamental para eliminar un gran número de pruebas.
En octubre de 2010 Patricia Heras ingresó en la prisión de mujeres Wad Ras de Barcelona y el 18 de diciembre de 2010 pasó a sección abierta, con la obligación de volver a dormir cada día en la cárcel. Muchas veces se ve el tercer grado como una “liberación”, o así nos lo quieren vender. El caso de Patricia demuestra que no es así, pues la situación en la que se encontraba la sobrepasó tantísimo hasta el punto que decidió matarse para así liberarse. La tarde del martes 26 de abril, Patricia no quiere volver a la cárcel y decide acabar con la presión que no soporta. Tanto el entonces alcalde Joan Clos, Jordi Hereu, concejal de seguridad, como todos los cómplices de este sistema penal asesino son culpables de la muerte de Patricia. Aun hoy hay una persona en libertad condicional y otras dos se encuentran en prisión, una en tercer grado y otra en segundo grado (Rodrigo Lanza).
Ante estos hechos, gente solidaria con Patricia y con los encausados del 4F han emprendido diversas acciones. El día 28 de Abril más de 500 personas se reunieron en el Forat de la Vergonya, la manifestación se dirigió hacia la prisión Wad Ras con bengalas y bajo los gritos de “Abajo los muros de las prisiones”, “Las cárceles son centros de exterminio”, “Vuestras rejas no callarán nuestros gritos de libertad”, “No es suicidio, es asesinato” o “Patricia Heras, ni oblit ni perdó”. Al día siguiente hubo una concentración de unas 300 personas en Zaragoza, en la que no faltaron golpes, la Policía Nacional llegó a cargar en dos ocasiones, provocando heridas a varias personas. Y el 4 de Mayo tuvo lugar una concentración en Madrid frente al Ministerio de Justicia. También hubo otras acciones solidarias, entre las que se encuentran las siguientes: en Girona se reventaron siete cajeros automáticos y se pintó en ellos la frase: “Patricia no olvidamos”, y se atacó con piedras el edificio del Ayuntamiento; además se han hecho pintadas en recuerdo de Patricia en diferentes ciudades. Aunque esto no es todo, en otros lugares se sucedieron más actos solidarios.
Más información en http://4f.noblezabaturra.org/
Carta abierta de Mariana Huidobro (la madre de Rodrigo Lanza) al Alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, en relación con el suicidio de Patricia Heras: https://info.nodo50.org/Carta-abierta-de-la-madre-de-uno.html