Autoras: Cristina Durán y Miguel A. Giner Bou. Editorial: Astiberri. 2023. 170 páginas
Aunque hayamos leído o escuchado incontables historias enmarcadas en la Guerra Civil española, la de María La Jabalina aún nos puede resultar nueva, ya que, a pesar de ser una figura popular en su tierra, Puerto de Sagunto (Valencia), su historia no había llegado hasta ahora a ser muy conocida en el resto del Estado.
Así, gracias a las viñetas de Cristina Durán y Miguel A. Giner Bou, podemos conocer hoy la vida y muerte de María Pérez Lacruz, la última mujer fusilada por el franquismo en el País Valencià, en 1942.
El cómic retrata en las primeras páginas el nacimiento de la ciudad, fruto del auge de la siderurgia, así como los primeros momentos tras el golpe de Estado y las circunstancias que empujaron a cientos de trabajadores y trabajadoras a movilizarse contra el fascismo. María, empleada de hogar de un médico falangista y militante de la Federación Ibérica de las Juventudes Libertarias desde los 17 años, decidió alistarse en la Columna de Hierro y acudir al frente como enfermera. A las pocas semanas resultó herida por la aviación franquista y tuvo que regresar a la retaguardia. A pesar de ello, al finalizar la guerra María fue detenida y acusada de crímenes que era imposible que hubiera cometido. El cómic nos muestra los años de encierro y vejaciones que sufrió María, a quien le robaron a su bebé nada más nacer, así como la larga lucha que libraron ella y su familia, especialmente su madre, Isabel, por demostrar su inocencia y lograr su libertad. Todos sus esfuerzos fueron en vano y, tras una tremenda farsa judicial, María fue condenada a muerte y fusilada en el muro del cementerio de Paterna, el hoy conocido como “paredón de España”.
La obra de Cristina Durán y Miguel A. Giner relata una historia tremendamente trágica pero consigue hacerlo poniendo el énfasis en el espíritu de lucha en vez de en el derrotismo y el duelo, acompañándola además de ilustraciones de gran calidad y a color. Para terminar, en las últimas páginas aportan documentos del proceso judicial, así como fotografías de la hermana y el sobrino de la joven anarquista y de algunas localizaciones que visitaron los autores durante su proceso de investigación.