Editorial: Antipersona. Autor: Marcus Rediker. Páginas: 460
Marcus Rediker es un historiador, ensayista y activista estadounidense; especialista de la historia social marítima y de la piratería, que imparte clases como catedrático en la Universidad de Pittsburgh, en Pensilvania. Ha escrito varios ensayos sobre los aspectos sociales de la historia marítima, y considera a los marineros y piratas del siglo XVIII como los precursores de los movimientos anticapitalistas modernos.
En 2002, Marcus Rediker publicó en colaboración con Peter Linebaugh ‘La hidra de la revolución : marineros, esclavos y campesinos en la historia oculta del Atlántico‘, publicado en castellano por Editorial Crítica en 2012. Sin embargo, en el año 2019, la Editorial Antipersona editó este ensayo traducido por Nacho Sáenz de Tejada, donde se profundiza en las raíces de los marineros como obreros proletarios en los albores del capitalismo preindustrial.
Colectivismo, antiautoritarismo e igualitarismo eran valores esenciales del marinero corriente a mediados del siglo XVIII. El marinero estaba atrapado entre su capitán, respaldado por el comerciante y el funcionario del rey, investido con unos poderes casi dictatoriales puestos al servicio de un sistema capitalista que se extendía rápidamente por el globo; y en el lado opuesto, la constantemente peligrosa naturaleza.
Se recoge en este ensayo una historia social donde los trabajadores marítimos ya no son cifras aisladas, sino que se estudian dentro de una totalidad que incluye su contexto cultural y sus relaciones sociales, políticas y económicas. Los marinos desplegaron tácticas de resistencia y desarrollaron diversas formas de organización autónoma. La vida y el trabajo internacional del marinero reclaman una historia mundial que ligue el pasado de las potencias coloniales con la historia intercultural del resto de continentes. Su vida transfronteriza nos invita a superar barreras que impone la historia nacional, a menudo artificiales.
Motines, huelgas, deserciones, sabotajes y disturbios formaron parte de la historia de los marineros, que comenzaron a verse a sí mismos como parte de una clase social distinta a la de sus mandos superiores. Esto nos conduce a la perspectiva del marino en un mundo laboral en constante mezcla entre la cooperación y el conflicto, y la toma de una conciencia como trabajador asalariado internacional.