Difunde: Oficina de Okupación de Madrid. 120 páginas. 2011.

“Una noche de invierno, tras dos intentos fallidos de abrir las ventanas del primer y segundo piso de un edificio abandonado, el grupo se batió en retirada, escalera de 5 metros incluida. De repente, dos policías secretas les pararon a 20 pasos del lugar de los hechos y lxs de las mochilas con el material sensible salieron corriendo descaradamente. Las preguntas más inocentes, junto a las respuestas más ingeniosas, permitieron a los de las mochilas escapar. Los maderos comentaron que con esas pintas y esa escalera parecían okupas” – Manual de Okupación.

¿Dónde encuentro una casa para okupar? ¿Cómo puedo preparar el plan de entrada? ¿Qué consecuencias legales puede acarrear?

La especulación, la propiedad privada, los desahucios (en España 178 al día, según la Plataforma de Afectados por la Hipoteca) y el derecho a reclamar espacios en desuso son, en muy resumidas cuentas, algunas de las razones por las cuales okupar es una opción real, legítima, esperanzadora, un arma contra el sistema, una demostración del poder de las personas, un ejemplo de acción directa, una herramienta de autosuficiencia.

El Manual de Okupación, difundido por la Oficina de Okupación de Madrid, acaba de hacer público todos los detalles de los pasos a seguir para okupar, basándose en la experiencia y en previas publicaciones como el Manual de Okupación de Casas Viejas (Centro Social Okupado de Sevilla) y el de Bulegoa Okupazioa (Oficina de Okupación de Bilbo).

El contenido se divide en los ‘pasos a seguir’, que incluyen información sobre cómo encontrar casas abandonadas, investigar a lxs propietarixs, planes de entrada, descripciones detalladas sobre trabajos de electricidad, agua y cerraduras, y temas legales, con consejos y trucos de todo tipo usando un lenguaje cuasi coloquial.

Como se explica en el párrafo introductorio, el manual no pretende ser una biblia de la okupación, sino una guía con ejemplos prácticos para facilitarle la vida a lxs futurxs okupxs (y a lxs más veternaxs también).  Así mismo, reivindica la okupación como fin en sí mismo y hace un llamamiento a la solidaridad con aquellas personas que deseen liberar espacios, librándose a su vez de los verdugos sociales que estrangulan los derechos más básicos.

El manual se puede adquirir online en la página www.okupatutambien.net o en el CSO Casablanca c/Santa Isabel 23, <m> Antón Martín (www.csocasablanca.org). También está disponible para leer en la web y en PDF para descargar.  La Oficina de Okupación de Madrid tiene una asesoría gratuita los jueves a las 21.00 en el CSO Casablanca.

Extraído del diario ABC (http://www.abc.es/20111116/madrid/abcp-manual-negocio-okupar-ajeno-20111116.html):

Manual del negocio de Okupar lo ajeno

Parece que los «okupas» ya no son lo que eran. Frente al carácter antisistema y en cierto modo romántico del movimiento, ahora, más profesionalizados que nunca, venden su propia «literatura». Se trata del «Manual de la okupación», una publicación de 120 páginas que acaba de ser editado y que se pone a la venta por el precio de 2,5 euros. Eso sí, «la Oficina de Okupación dispone de un sistema de préstamos para aquellas personas que no deseen o puedan adquirir una copia». La recogida se realiza en el edificio «okupa» Casablanca, en Antón Martín, donde, además, pueden dirigirse quienes soliciten una copia desde otras provincias.

Si bien existen otros manuales al uso, escritos en Sevilla, Barcelona y Bilbao, es el primero que se edita (y con un diseño de bastante calidad) en el entorno del movimiento de la capital. Su contenido no tiene desperdicio. Desde la propia portada, rotulada por un entrecomillado del director general del Ivima: «Son muy profesionales, están muy organizados. Se las saben todas». Ya en páginas interiores, tras el índice, otra cita textual, ésta de Esperanza Aguirre: «Está de moda “okupar” casas en Madrid, como se puede “okupar” un hotel, ahora van a “okupar” un teatro; pues qué mejor que “okupar” mi casa. Eso sería portada de NY Times».

«Sin pagar un duro»

En el capítulo de presentación, los autores ya sientan las bases de sus objetivos: «Este manual pretende acercar la okupación a toda persona interesada en salir del mercado inmobiliario y disfrutar de un espacio digno sin pagar un duro».

Luego, el manual se estructura en grandes epígrafes, como «Los preliminares»: hay que dar un «paseíllo»: buscar el barrio («obrero, viejo y con más concentración de gente afín») y el edificio ideal, para lo que se aconsejan herramientas informáticas.

Luego se pasa al «Meollo del asunto»: es la hora de los «pipeos» (vigilancia en los alrededores), y bloquear el tráfico, mediante, por ejemplo, colocar «un coche averiado» o simular «una despedida de soltera para cortar una calle». «Si se es amable y divertido —añaden—, nos daremos cuenta de que los taxistas no son tan malos». Hay, dicen, que inutilizar las cerraduras («con soldadura en frío y Superglue»). Las «Técnicas de entrada» son de lo más prosaicas: romper una ventana, colarse por el tejado y, una vez dentro, «asegurar la puerta con muebles, tablones, cadenas…».

Lo siguiente es un tratado de puro bricolaje: cómo enganchar la luz y el agua, y «ñapas» de todo tipo. Hay un listado de los delitos que se cometen cuando se «okupa» y su defensa jurídica. Para los más torpes, un glosario con los tipos de cerraduras, herramientas y llaves de paso. Lo mejor, sin duda, el poema de Benedetti que cierra el manual de «okupación».

En este ejercicio de sacar pecho ante la ley, además, han montado supropia «Oficina de Okupación de Madrid». Según la web okupatutambien.net, «todos los jueves, de 21.00 a 22.30, abre sus puertas en el Centro Social Okupado Casablanca, en la calle de Santa Isabel, 23, Metro Antón Martín». Es el verdadero centro logístico y cuartel general de estos radicales en la región.