En 2011 se declaró a las cotorras especie invasora, un término injusto para los animales que son capturados y desplazados de su lugar de origen por capricho humano y, que gracias a su capacidad de adaptación, consiguen sobrevivir. Desde entonces, se ha hecho un uso cada vez más intencional del lenguaje en torno a ellas con el fin de manipular la opinión pública.
Los bulos que se difunden sobre las cotorras, como que son una amenaza para la biodiversidad dentro de las ciudades o que transmiten enfermedades, buscan principalmente justificar su matanza, que el ayuntamiento de Madrid ya ha financiado con 2,9 millones de euros. Para más información sobre la decisión de Madrid de exterminar a sus cotorras, nos remitimos a un artículo que publicamos al respecto hace casi un año y medio.
Si verdaderamente hubiese algún problema con estas aves y tuvieran que ser “gestionadas”, consideramos que lo mínimo sería que esa gestión se hiciera de la forma más ética posible. Algunos municipios de la Comunidad de Madrid como Leganés, Pinto, San Fernando de Henares y Getafe ya han desechado la idea de la matanza, poniendo en marcha otras medidas de control poblacional como la esterilización por vasectomía.
Con la campaña ‘Son nuestras vecinas’ queremos desmontar los mitos sobre las cotorras y acercar su realidad a la población local que comparte desde hace años la ciudad con ellas.
¿Es tan mala la cotorra como la pintan? ¿Es una especie invasora? ¿Es cierto que todas sus cualidades son defectos e impedimentos para la convivencia? ¿Es verdad que van a arrasar con la biodiversidad ellas solitas? ¿Las ha creado el mismísimo diablo, a su imagen y semejanza? En vista de lo socialmente arraigadas que están algunas creencias sobre las cotorras (argentinas y de Kramer, en el caso que nos ocupa), no nos queda más remedio que divulgar ciertas informaciones basadas en estudios. Estas voces científicas contradicen y desautorizan los principales argumentos que se suelen dar para justificar el odio e incluso la matanza de nuestras vecinas aladas. Si te choca lo que vas a leer, es normal, llevan muchos años machacándonos con lo mismo. Pero en tu mano está acoger estas informaciones con honestidad y cambiar algunos puntos de vista, o seguir atrincherándote en las creencias y las versiones oficiales. Puedes leer todos los argumentos científicos en la web Son Nuestras Vecinas.
Por un Madrid más justo, defendamos a las cotorras.
Asamblea Antiespecista de Madrid